Los principios activos o aceites esenciales de esta planta se encuentran principalmente en sus hojas.
Las propiedades de la ruda son muchas, pero se destacan principalmente las relacionadas con problemas digestivos, cólicos y ansiedad.
– Digestivas. La ruda facilita los procesos digestivos ya que estimula la función biliar. Por eso es muy recomendable beber infusiones de hoja de ruda para tratar casos de estreñimiento o desórdenes digestivos.
– Antiespasmódica. La ruda es muy útil para tratar casos de cólicos estomacales, de la misma forma sirve para tratar las diarreas.
– Emenagoga. La ruda sirve para disminuir los malestares ocasionados por la menstruación. El consumo de la ruda reduce los dolores de cabeza y la sensación de irritabilidad, típicos del periodo menstrual y del síndrome premenstrual. También se emplea en casos de amenorrea.
– Sedante. Ejerce un efecto calmante y relajante, la ruda se utiliza para disminuir la sensación de dolor en golpes o heridas. Además, reduce la ansiedad y el nerviosismo.
– Circulatoria. La ruda puede tener efectos muy positivos para tonificar arterias y normalizar el flujo sanguíneo.
Modo de empleo: Recomendado para infusiones. Verter el contenido de una cucharada sopera en agua hirviendo y apartar del fuego. Tapar el recipiente y dejar reposar de 8 a 10 minutos. Si son raices, cortezas o semillas, hervir a fuego lento de 2 a 4 minutos. Colar y endulzar al gusto.
Cantidad: 50 gr.